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China, uno de los principales actores mundiales tanto en la producción como en el consumo de alimentos, enfrenta serias preocupaciones en su industria de zumo de manzana. Muchos cultivadores escatiman en gastos durante el cultivo para satisfacer las altas demandas nacionales y de exportación, dejando la seguridad en segundo plano.

Un problema importante es el uso excesivo de pesticidas, lo que ha provocado niveles alarmantes de contaminación por arsénico en algunos productos chinos de zumo de manzana. Esto no es solo un problema de calidad, es un riesgo para la salud. La exposición al arsénico puede causar irritación de garganta, calambres musculares, erupciones cutáneas y, en casos graves, incluso la muerte.