Las Cataratas del Niágara, uno de los sistemas de cascadas más famosos del mundo, se componen de tres cataratas: la Herradura, la Americana y el Velo de Novia. Si bien las dos últimas se encuentran bajo jurisdicción estadounidense, palidecen en comparación con las cataratas de la Herradura de Canadá, las más grandes y espectaculares de las tres. Esta ventaja geográfica es una de las principales razones por las que las Cataratas del Niágara, Ontario, atraen a muchos más turistas que su contraparte de Nueva York.

El atractivo es simple: cuanto más grande es la cascada, más dramática es la experiencia. Las cataratas de la Herradura son más brillantes, ruidosas y visualmente impresionantes, lo que las convierte en el principal atractivo para los visitantes. Como resultado, el lado estadounidense a menudo se siente decepcionante en comparación, dejando a muchos turistas con la sensación de que se están perdiendo la mejor vista.
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