¿Por qué gritan tanto aquí?
Todo un coro de animadoras a todo pulmón – y uno se pregunta: ¿Qué están gritando en realidad? No te preocupes, el canto no es lo suyo – apuestan por gritos precisos para entusiasmar al público.
Ya en el siglo XIX, el cheerleading se centraba más en la disciplina que en la melodía. También hoy en día: Un buen grito de guerra no necesita notas, sólo pasión – ¡y un órgano potente!
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