
En China, el maíz a veces es tratado con ciclamato de sodio, un edulcorante artificial blanco que realza la dulzura y el brillante tono amarillo del maíz. Aunque este aditivo está aprobado para su uso en muchos países, está prohibido en Estados Unidos debido a preocupaciones de salud.
Estudios han relacionado el ciclamato de sodio con posibles riesgos de cáncer y daño hepático, lo que motivó su prohibición. Así que, aunque el maíz pueda verse y saber más apetitoso, el químico detrás de ese impulso levanta serias banderas rojas sobre su seguridad a largo plazo.