Protector Natural
Nyx seguía asombrando a la familia con sus agudos instintos y su naturaleza obediente. Una noche, se puso alerta y gruñó suavemente, atrayendo la atención de todos hacia la ventana trasera. El Sr. Johnson miró hacia afuera y vio un mapache cerca de los contenedores de basura. “Buen trabajo, Nyx”, dijo, impresionado por la agudeza del perro y agradecido de que no fuera nada peligroso.
Este pequeño pero significativo incidente reforzó el valor de Nyx como algo más que una mascota. Su comportamiento protector hizo que la familia se sintiera aún más segura. No solo era un compañero, era un guardián confiable. Quedó claro que adoptar a Nyx había sido más que una buena decisión; fue la mejor elección que pudieron haber hecho.
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