El mono elige la mochila equivocada
Una mujer intenta la clásica pose de “avión” en la playa, con los brazos extendidos y los ojos cerrados de felicidad, hasta que un mono salvaje salta sobre su espalda y le da una bofetada en la cara. El mono parece ligeramente molesto, como si la hubiera confundido con un Uber con mejores aperitivos.
Su expresión es puro arrepentimiento en forma humana: el momento exacto en que se da cuenta de que “interactuar con la vida silvestre” sonaba mucho mejor en el folleto. El mono, mientras tanto, ya está planeando a qué turista robar a continuación.
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