Aplanamiento de Senos
En ciertas culturas históricas de Asia y África, especialmente entre las jóvenes, el aplanamiento de senos se realizaba para retrasar la pubertad y evitar la atención masculina no deseada. Las madres presionaban piedras calientes o vendaban los pechos de sus hijas para reducir el crecimiento de los senos, creyendo que así las protegerían del matrimonio precoz o de agresiones.
Aunque no se discute ampliamente en la historia, la práctica persiste en algunas regiones hoy en día. Los efectos físicos y psicológicos son graves: dolor, infección y trauma a largo plazo. Es un recordatorio de cómo la belleza y la presión social pueden manifestarse de maneras profundamente dañinas y ocultas, a menudo bajo el disfraz de protección.
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