Cuando tu gato odia todas las camas que le compraste
Lo intentas. De verdad que lo intentas. Compras las camas para mascotas más lujosas y mullidas. Investigas reseñas, comparas precios, eliges la que tiene espuma ortopédica y tecnología de memoria, y tu gato prefiere el suelo frío y duro. O peor aún, la cesta de la ropa sucia.
No es nada personal (probablemente). Algunos gatos simplemente prefieren lugares extraños e incómodos para apoyar sus regias cabezas. Tal vez no les guste que los consientan. Tal vez simplemente disfrutan confundiéndote. De cualquier manera, ¿esas camas caras? Son para ti, no para ellos.
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