Cuando tu gato se desinfla
Todos hemos tenido esos días en los que simplemente… nos desinflamos. Este gato está viviendo ese momento, tirado plano en el sofá como si hubiera renunciado por completo a la estructura. No está sentado. No está acostado. Está derramado.
Y curiosamente, parece perfectamente feliz con ello. Relajado. Fluido. En paz con el mundo. Quizás todos deberíamos intentar desinflarnos de vez en cuando.
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