Remedios “Milagrosos” de Aceite de Serpiente
En el siglo XIX en Estados Unidos, el “aceite de serpiente” se convirtió en sinónimo de fraude, y con buena razón. Los vendedores ambulantes lo vendían como una panacea, prometiendo que curaría la artritis, la fiebre, la fatiga, la calvicie y más. Muchos elixires no contenían aceite de serpiente en absoluto. En cambio, estaban llenos de alcohol, cocaína, morfina o hierbas peligrosas.
Estos tónicos proporcionaban un alivio temporal gracias a sus ingredientes embriagadores, pero los efectos a largo plazo incluían la adicción, el envenenamiento e incluso la muerte. La gran cantidad de víctimas finalmente impulsó la creación de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA). Si bien el aceite de serpiente real (de serpientes de agua chinas) tiene propiedades antiinflamatorias, el aceite de serpiente que obtenían los estadounidenses era más veneno que poción.