Un evento deportivo siempre promete variedad, y los fans más ingeniosos aportan sorpresas curiosas adicionales con acciones extravagantes. Un ejemplo de esto es la chica de la foto. Inspirada por su profunda devoción al equipo, tomó aire, se puso su escueto bañador y saltó al campo.

Se puso en marcha, deleitó al público con su descaro y pronto dejó atrás a los participantes deportivos, ya fuera corriendo o de pie. Sin embargo, la directiva del club no se tomó muy bien esta acción y la mandó a detener de inmediato. Queda por ver si la rubia se arrepiente de su acto. En cualquier caso, ha dejado una impresión duradera en el público.

Advertisements
Advertisements