Estricnina como tónico
La estricnina, un veneno mortal utilizado en trampas para ratas, antiguamente se añadía en pequeñas dosis a tónicos y pastillas como estimulante. Los médicos creían que fortalecía el corazón, estimulaba la digestión y curaba la fatiga. Incluso se recetaba a atletas y soldados para un chute extra de energía.
Pero la estricnina es tóxica incluso en cantidades minúsculas. Los síntomas de la sobredosis incluyen convulsiones, insuficiencia respiratoria y la muerte. Con el tiempo, su inclusión en píldoras “energizantes” y bebidas energéticas causó más daño que beneficio, y los gobiernos finalmente prohibieron su uso sin receta. Hoy en día, a nadie se le ocurriría beber veneno para mantenerse alerta, a menos que sea en un videojuego muy perturbador.